1936. Eduardo Depauli, un milagro de la radiotelefonía que logró colmar el Estadio Centenario.

Fue un verdadero milagro de nuestra radiotelefonía sin duda alguna y la mejor prueba de ello lo registra la tarde del 19 de diciembre de 1936, ni más ni menos que en el Estadio Centenario.

En esa jornada, Eduardo Depauli –el llamado “Frégoli del Éter” –hizo la hazaña de colmar con su convocatoria nuestro principal escenario deportivo, encabezando un espectáculo que tenía de todo, como en botica…

Desde fútbol y fuegos artificiales, hasta las estrellas del radioteatro, pasando por la actuación del conjunto de Elvino Vardaro, uno de cuyos bandoneonistas era un muchacho gordito y peinado a la gomina llamado Aníbal Troilo.

Un privilegiado testigo y fraternal compañero artístico de Depauli fue Miguel Angel Manzi, consagrado hombre del espectáculo –tanguero de alma- que cuando hablaba del “Frégoli del Éter” se emocionaba con toda razón:

Postal «souvenir» evocativa. (Colección Horacio Nigro, LGdS)

“Depauli nació el 28 de febrero de 1909, en pleno Carnaval, en un casona de la calle Arenal Grande y Cuñapirú, en el Barrio Reus.

De muy botija fue crack de la rayuela, la payana, la bolita, el balero, el rango, la escondida y cuanta cosa se cruzara que exigiera inteligencia y habilidad. La misma destreza la empleó para hacer la rabona cuando sus padres decidieron mandarlo a una escuela de barrio. A los doce años cambió la escuela por la calle y se inicia en el trajín diario, vendiendo caramelos en el “Parque Urbano”.

Ya de botija entonaba bien y mientras “pateaba” con un canastito –que lo aguantaba con una cinta que le rodeaba el cuello –se mandaba alguna canción. Siempre hay uno, el primero, que intuye a los grandes y le marca el camino, ese que después se hace andando, y ese uno fue un mozo de “La Vaquería”, la misma “Vaquería” que fue escenario de Tania y Libertad Lamarque y del negro Caruso, que también solía ser  un excelente boxeador.Y aquel mozo le dijo a Depauli: “Dejá los caramelos, cantá y “tirá la manga”, que vas a hacer más “guita”.

Y así fue: cantó, ganó más “guita” y se comía los caramelos. De los cinco hermanos que tenía, uno de ellos vidriero, llamado Américo, lo reclamó para que aprendiera su oficio y estuviera junto a él. A Américo le gustaba la farándula y llevaba a Eduardo con él. Y Eduardo se encontró que iba andando por el camino que le gustaba. Era infaltable en las fiestas del barrio”. 

LA TARDE INCREÍBLE

“Donde cantaba –recuerda Manzi- decía chistes y hacía imitaciones, preferentemente de tanos». Así las cosas, ayudando a su hermano de día y esperando la noche para animar serenatas, llegó el año del centenario de nuestro Uruguay. Ese año sale el conjunto carnavalesco “Palán Palán”, cuyas hermosas canciones componía Adolfo Mondino con letras de Víctor Soliño. En este conjunto ingresó Depauli dando así el primer paso firme hacia la popularidad. Oficiaba de animador, cantor, imitador y todo con gran calidad. Se le esperaba en los barrios. En 1931 vuelve en los carnavales con “Palán Palán”.

Hacen una presentación en Radio América, en aquel entonces en Colorado y Gral. Flores. Los dueños aprecian las grandes condiciones de Depauli le ofrecen un puesto de locutor, cosa que no le quedaba cómodo y eso lo llevó a crear el primer “boom” de la radiotelefonía, el “Consultorio Jocoso”, manejado por “Nicola Paparulo”.

«Pin» o escarapela de «Candelario». (Colección: Horacio Nigro, LGdS)

Con este personaje en el aire se inicia como “Frégoli en el Éter” Y va largando con cautela el personaje más popular de todas sus creaciones “Candelario”.

Cumplido un ciclo en Radio América, pasa a CX42 Radio Rocci, con estudios en la calle 8 de Octubre, donde recibe el testimonio de su gran popularidad cuando festeja un aniversario de su personaje “Nicola Paparulo”: parada de tráfico, gran lío. Interviene la Policía y tiene que entrar al estudio por la parte de atrás de la radio. Sigue creando personajes: Pintos Cardeiro, “El Jilguero de las Tres Patas” (cantor), “Toto Cortafierro”. Pasa a Radio Carve y Radio Montevideo, que estaban juntas en 18 de Julio 928.

Vuelve a la Radio América, ahora en Colonia y Cuareim y entra a tallar el insigne poeta Ovidio Fernández Ríos, “Sarrasqueta”,  y con él el personaje “Virundela” empieza a interpretar páginas de contenido filosófico, ganando así la totalidad de la audiencia. Luego Fernández Ríos extiende sus libretos y comienza  a hacer comedias donde entran todos sus personajes del creador Depauli, colaborando en la parte femenina Rosita Miranda, más tarde primera actriz de la Comedia Nacional. Colaboró también la damita joven Nery Perey.

Eduardo Depauli y el escritor Ovidio Fernández Ríos, («Sarrasqueta»), una dupla imbatible en la preferencia popular, aquí frente al micrófono de CX50 El Mundo.

En Radio América se gesta el espectáculo más grande de nuestra radiotelefonía, donde se encumbra un artista de muy humilde procedencia, en un escenario donde nadie jamás –hasta ahora- pudo repetir la hazaña: 70.000 personas o más en el Estadio Centenario, homenajeando a su artista predilecto.

Esto fue el sábado 19 de diciembre de 1936. El elenco que animó aquél espectáculo debe ser recordado por el valor de alguna de las figuras que actuaron. El programa se inició con la Vuelta Olímpica, encabezada por Depauli seguido de todo su elenco. Siguió un gran match de fútbol entre los componentes de los programas de Depauli y un team integrado por miembros de la Liga Profesional. ¿Quiénes eran éstos?. Nada menos que Besusso, Morales y Cabrerita, Lirio Fernández, Mamberto y Camera y ¡ojo ahora! Santos Urdinarán, Grazzi, Lorenzo Fernández, Chirimino y Figueroa.

El cuadro que lo enfrentaba estaba compuesto por el elenco de Depauli, actuando de centrodelantero “Candelario”, que al final, pasándolos a todos, metió el único gol del partido. Arbitró Juan Ilaria.

Carnet del «Club de Admiradoras de Candelario». (Colección Horacio Nigro, LGdS).

Aquí no terminó el espectáculo, pues actuó Elvino Vardaro, con su Sexteto “Los Virtuosos del Tango”, estando en la fila de bandoneones Aníbal Troilo. El Sexteto había debutado en Radio América el día anterior al espectáculo, pero informados de la razón del mismo adhirieron a Depauli. Al cierre, fuegos artificiales, globos, palomas, bandas… y más de cien artistas. Después del espectáculo, uno de los dueños de la citada emisora le regaló un auto cero kilómetro a Depauli, en el cual desfiló por toda la cancha.

Hasta aquí la narración de Manzi, rindiendo tributo a esa inolvidable figura del “Frégoli del Éter”, que marcara todo un luminoso capítulo en nuestra radiotelefonía.

Dibujo alegórico de la jornada del Estadio, publicada por «Cine Radio Actualidad». (Foto archivo Horacio A. Nigro, LGdS]

Toma de un programa de Eduardo Depauli (archivo de «Radioactividades», CX26, Radio Uruguay)

 

 Clip de la película «Radio Candelario»(Director: Rafael Jorge Abellá – 1939), producida por los estudios Cineson, protagonizada por el popular cómico radial de la época: Eduardo Depauli. «La película en sí no pasa de ser una serie de números musicales de dudosa categoría improvisados frente a la cámara, mientras que el
locutor-protagonista lucha por retener la propiedad de una «broadcasting». Se apoyaba en actores y personajes de la radiotelefonía, para quienes el cine no era necesariamente un lenguaje y una forma de expresión diferente- Incluye en el reparto a las Hnas. Méndez, Miguel Ángel Manzi, entre otros.

Ver «Apuntes para una historia № 7: / Guillermo Zapiola, 6 abr. 1985- De la serie publicada en: Suplemento Artes & Letras, 23 de febrero-29 de junio de 1985- Montevideo : Diario El País. (19 entregas semanales)

  • ACERCAMIENTOS AL PERSONAJE DESDE EL ÁMBITO ACADÉMICO:

Eduardo Depauli. La radio y la puesta en escena de lo popular. Mónica Maronna | Universidad de la República – Uruguay

En la década del treinta, la radio ya se había convertido en un negocio próspero dejando atrás la etapa de «ensayos» que había caracterizado la década anterior. Numerosas antenas de trasmisión dispersas por todos los barrios de Montevideo representaban el triunfo de una nueva era y se convertían en el símbolo más visible del nuevo ambiente cultural.

La radio sacudió la «ciudad letrada» de base escrituraria porque remite a la oralidad, pero sobre todo porque amenazaba convertirse en «el triunfo de la vulgaridad y la chabacanería popular» apartada del canon intelectual imperante. A partir del estudio de la trayectoria radial de Eduardo Depauli (1932-1946), esta ponencia se propone examinar la coexistencia, cruces y transformaciones de tradiciones culturales populares preexistentes y la creación de nuevas modalidades asociadas a las industrias culturales en expansión.

El objetivo es abrir una ventana para observar la cultura popular durante un momento de consolidación del medio. La popularidad de los programas de humor de Depauli fue obtenida gracias a la versatilidad de una voz que le permitía construir y dar vida cotidianamente a múltiples personajes reconocibles en cualquier barrio montevideano.

La incorporación de la cultura del inmigrante mediante la parodia y la reproducción de estereotipos, a la vez que recogía una tradición popular de larga data -expresada sobre todo en el carnaval- se modificó al proyectarse en un escenario de alcance más amplio y cumplió una función integradora del «otro» en la sociedad y la cultura.

El análisis de la trayectoria de Depauli, por su origen popular, sus personajes, el éxito de sus multitudinarias convocatorias públicas, su pasaje fugaz por el cine, su diálogo constante y fluido con los oyentes mediante cartas, el sueño fallido de triunfar en Buenos Aires, la prematura muerte en la cúspide de su carrera y hasta su posterior olvido, permite problematizar algunos ejes temáticos relevantes para una historia cultural de los medios. (1)

Ese es el tema de la ponencia de la historiadora Prof. Mónica Maronna (Universidad de la República), investigadora universitaria uruguaya, realizada entre los días 14 y 15 de septiembre de 2011, en el marco del seminario internacional Historia de los medios en América Latina en la sede de la Biblioteca Nacional de Buenos Aires, Argentina.

Modera | Laura Vázquez
Cámara | Laura Tusi, Soledad Bianchi y Gastón Cabrera

 

«La radio y la puesta  en escena de lo popular: El espectáculo radial montevideano en los años treinta a través de la trayectoria  de Eduardo Depauli» ,  Mónica Maronna, Universidad de la República, Uruguay. (Publicado en «Cuadernos de la Historia de los Medios», ReHiMe, Año 5, Nº 4, 2015/2016).

 

Referencias:

  • Red de Historia de los medios (ReHiMe) se dirige a los interesados en la Historia de los medios. Tiene como objetivo el intercambio de información, el debate de investigaciones en curso y la circulación de materiales para la enseñanza.
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3 respuestas a 1936. Eduardo Depauli, un milagro de la radiotelefonía que logró colmar el Estadio Centenario.

  1. Impresionante soy de Paysandu, trabajo en radio y soy un amante de las historias de radio como éstas. Realmente impresionante, esto es un tesoro de la radio. Se me eriza la piel. Muy buen trabajo. Saludos desde Paysandu. Marcos Maldonado «Noches de Radio»

  2. luis murdocco dijo:

    me agrada muchisimo todo este material ya casi de una época pasada, pero que fue genial.
    Querido amigo Horacio , y a todos, quisiera dar un aporte de mi mejor experiencia de radio en mi viaje a la Antártida, , si es pertinente,
    algunas anécdotas, que pueden ser interesantes…
    un 73 enorme para todos Luis Cx1bbl

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