José «DeQo» Núñez. (1950-2015): Meridiano del rock en la radio uruguaya.

José «Deqo» Núñez. Foto: María José Murialdo

José Luis Núñez Latorre, «DeQo», (4 de Abril de 1950 – 19 de Enero de 2015).

Fue locutor y conductor de radio. Conocido fundamentalmente por el programa «Meridiano Juvenil», (más tarde simplemente «Meridiano«), que con este nombre se estrenó en 1973, en el dial uruguayo, a través de la radioemisora del Estado uruguayo, CX26 del S.O.D.R.E., AM 1050, (hoy CX26 Radio Uruguay, Radiodifusión Nacional), y que más recientemente pasara a su hermana CX38 Emisora del Sur.

Fue voz institucional de la FM de Radiodifusión Nacional, «Babel FM», locutor y presentador.


Comenzó a hacer radio en de forma amateur en 1969, en el seno de Radio Sarandí. En los años ’70 co-organizó los conciertos «Altonivel 1 a 3» en el Teatro el Galpón. Luego fue informativista en CX32 Radio Sur, Radio Centenario, y en 1976 ingresó por concurso al SODRE. Trabajó como redactor creativo en agencias de publicidad. Se formó en talleres como el de Crítica y Análisis Musical con Coriún Aharonián. Volvió a la radio en Independencia, Sarandí Sport. En 1997 publicó el libro Los Beatles en Uruguay. Recibió reconocimientos como el Premio Nacional Periodistas CNHD, el Premio Trayectoria Meridiano otorgado por Luna producciones y el Premio trayectoria 35 años Meridiano otorgado por la organización «El Grubi de la Esquina».  (¹)

audioiconSaludo de despedida de sus compañeros de Radiodifusión. (Fuente).


 «Meridiano», tuvo una gran influencia en miles de jóvenes uruguayos, escapando a las masivas y también populares «Nueva Ola», los intérpretes del género «romántico internacional», o «la música facilonga y superficial», «comercial», como de alguna manera se la catalogó en algún momento. Por lo menos, diferente y en todo caso  inexistente: ¿¡Qué emisora iba a difundir Led Zeppelin, Yes, Black Sabbath, Crosby, Still, Nash and Young, Rush, Emerson, Lake and Palmer, entre otros?!. Nadie.

Los hijos de la generación del 50, 60, se criaron en el hogar de sus padres, escuchando por «permeabilidad», lo que se difundía: folklore argentino (de explosiva de difusión en los Sesenta), tango, quizá algún flamenco español si el origen familiar era español. Quizá en algun caso, sonara una 9ª Sinfonía de Beethoven, o quizá un «Moldava» de Smetana, por iniciativa del jefe de familia, que acostumbraba a poner el disco correspondiente en el «combinado» del living comedor; para sonar en toda la casa, entrando en los dormitorios, despertando a la familia, suave, encantadoramente, algún domingo de mañana.

Los adolescentes de estos años, los sesentas, tuvieron el dial suficientemente cubierto con «bailables», desde Bill Haley y sus Cometas a los representantes de la «Nueva Ola» porteña (la de Buenos Aires, con sus «Palito» Ortega & Co. a través del «Club del Clan»).

Hacia los 70s la «porteñada argentina» (con sus cantores melódicos y bailables pasando por la cantante «Tormenta», «Aldo y los Pasteles Verdes» hasta César «Banana» Pueyrredón y su grupo, ya en los 80; y, por cierto, otros muchos más.

De ello se encargaron «Aquí está su Disco» por CX20 Radio Montecarlo, los «Bailables Sanidor» de CX16 Radio Carve, y los distintos disc-jockeys de la radio montevideana. En las radios del Interior, el asunto fue «nefasto».

Pero había una minoría que no toleraba el «chiquita… movéte… movéte» y el «sha-la-la» o el «sucundún». Posiblemente a algunos no les gustaba bailar, quizá «gorditos», «feítos», «tímidos», porque no «enganchaban» a ninguna jovencita de su edad, con quien estrenar un romance de adolescencia.

Quizá, pero fundamentalmente era, simplemente, un tema de diferente sensibilidad musical. Unos, inclusive, habían heredado el gusto por otro género heredado de los 20, 30 y 40s: el jazz, escuchando los discos de sus padres, ya desde niños.

Y la radio, (también la TV, cuando entró a tallar en las preferencias hogareñas), reflejaron, difundieron (y en algun caso crearon), moldearon los gustos musicales. Y ello sucedió  en cada época.

El rock, es un género de característica contestataria, y ella afloraba en los 70s. También, encontró la influencia de la música sinfónica, dando origen al rock sinfónico. Música clásica y jazz, confluyendo con guitarra eléctrica y bajos, teclados y más tarde sintetizadores, con sus riffs y solos de sólida ejecución, climas, algún grito o lamento desgarrador, son propios del rock progresivo:

Las piezas (más que canciones) se encuentran en forma de largas suites (de 7 minutos a 45 minutos más o menos) de varias partes, con un tema recurrente por lo general. Es muy frecuente que los músicos tengan una formación musical sólida. Se da mucho el virtuosismo en cuanto a lo complejo de la música y la ejecución de los integrantes.
El instrumento que casi nunca puede faltar es el teclado en cualquiera de sus formas, desde instrumentos acústicos como el piano o el clavicordio o el órgano de viento hasta los órganos Moog o sintetizadores. Las letras abarcan temas desde la ciencia ficción hasta el existencialismo.
Otra forma de rock progresivo es la que hizo Pink Floyd por ejemplo. La música es más ambiental y lenta, menos virtuosa pero presenta una forma experimental.
[…] El rock progresivo tiene raíces desde 1967 aproximadamente. Los primeros trabajos reconocidos son de 1969. La cúspide del rock progresivo se dio en 1974;  posteriormente los grupos ya no ofrecían nada completamente original sino recurrente.
(Fuente)

No puede escribirse la historia del rock en Uruguay sin mencionar al DeQo.

Forum-Quote-iconNúñez era “amplio y culto” en cuanto a sus intereses musicales, incluso por fuera del rock, y remarcó la difusión que le dio al rock nacional en épocas en el que este género no tenía marketing ni estaba de moda. “Lo que pasaba lo pasaba por convicción”. (²)

El diario «La Diaria», de Montevideo, en su suplemento «Suple R», publicó en 2009, la siguiente entrevista realizada por Lorena Bello, al comunicador, hoy desaparecido físicamente.

Tapa del Suple R Nº 19, La Diaria (24/04/2009).

DIAS DE RADIO: ‘Deqo’ Núñez, 35 años de «Meridiano Juvenil» (La Diaria, Suple R, 24/4/09).

Durante 35 años la apertura de “Meridiano Juvenil” mantuvo de cortina la canción “Never Before”, de Deep Purple, y jamás mencionó el nombre del conductor. José ‘Deqo’ Núñez es la voz y la cabeza detrás del programa referente en la difusión de rock’n’roll en la radio uruguaya, que motivó la creación de un grupo en la red social Facebook llamado “Uruguayos que se hicieron rockeros por culpa del Deqo”. Actualmente se emite de lunes a viernes, de 13 a 14 horas, por la nueva Emisora del Sur 94.7 FM (SODRE), flamante sonido estéreo que reivindica la vigencia de un clásico.

quoteLeftMeridiano Juvenil lo comenzaron César ‘Cacho’ Badín y Julio Zavaleta, el 3 de octubre de 1973, cuando el entonces Director de Programación, Armando Diez, les sugirió hacer un programa de rock con todo el material que había y que no se estaba editando en Uruguay. Era una suerte de vitrola, iba de lunes a viernes a las 13:30 por CX 26, no tenía conducción y las canciones las presentaba el locutor de turno. Yo era oyente de ese programa, y cuando entré al SODRE, me moría por poder ser locutor ahí, mientras presentaba a Bach en la radio de música clásica CX 6.

Entonces a veces, a esa hora, me cambiaba de radio con el locutor de CX 26 para hacer la locución de Meridiano. Como yo no podía con mi genio, cuando conseguía algún disco que no estaba en la discoteca, les pedía a Cacho y Julio para incluirlo, y así de a poco también fue cambiando la manera de presentar las cosas al aire, incluso hasta en la pronunciación del inglés, sin tanto acartonamiento.

De alguna manera el oyente podía sentirse como un par del locutor, además yo era de los más jóvenes en el cuerpo de locutores de aquella época”, cuenta Deqo.

¿Cuándo comenzaste a encargarte definitivamente de “Meridiano Juvenil”?

Oficialmente me dieron la conducción del programa cuando llegó la democracia, pero después del Plebiscito del ‘80 las autoridades del SODRE se pusieron más permisivas.

De a poco fui aportando cosas, y a partir del ‘84 me pidieron programarlo. Empecé a hacer cambios inmediatamente, como incluir música que yo había escuchado, realizar entrevistas, difundir música uruguaya de a poco. Tuve algunas paradas de carro por pasar Baldío, Fernando Cabrera, o Los que iban cantando. Comencé a generar programas especiales, informes sobre artistas, intercalando material periodístico que extraía de revistas como “Cerdos & Peces”, por ejemplo.

¿Qué formación tuviste antes de ingresar al SODRE?

Un día en el programa “Señoras y señores” de Radio Sarandí, Carlos Martins pasó un tema de un disco recién editado en Inglaterra, y desafió a que el primer oyente que dijera el nombre de la banda se ganaba el disco.

Yo llamé y contesté que eran los Moody Blues. Tenía 18 años, y cuando entré a la radio a buscar el disco quedé fascinado. En el ‘70, cuando terminó el proyecto de Ruben Castillo, en Sarandí, muchos de sus periodistas emigraron a CX 42 Radio Vanguardia, y con ellos sus oyentes.

Allí conocí otros grandes comunicadores, como Nelson Marvin, quien vio que yo conocía de rock, que había ido a ver las Musicasiones, los conciertos beat, Los Shakers, Los Mockers. Entonces me invitó a hacer una columna sobre espectáculos y música rock uruguaya, y esa fue la primera vez que salí al aire.

Poco tiempo después hice un curso de locución, en la Escuela Nacional de Declamación, y antes de terminar el curso un profesor me pasó el «pique» de que en CX 32 Radio Sur estaban necesitando un informativista, entonces hice una prueba y quedé.

Después de dos años me «puteé» con el jefe y me fui. Pasé unos meses sin trabajar, y un compañero del curso me avisó que necesitaban un informativista en CX 36. Hice una prueba y quedé, pero en el ‘76 tuve allí un problema con un mayor del ejército, que era director de la radio, quien me amenazó, me dijo que si no firmaba la renuncia las fuerzas conjuntas iban a allanar mi casa. Como me opuse a firmar la renuncia, me pagaron el despido y me fui, y por suerte no me mandaron a las fuerzas conjuntas.

Entraste al SODRE durante la dictadura militar, ¿viviste la censura o tuviste miedo?

No tenía miedo, porque yo no imaginé que la dictadura fuera a durar tanto, no podía creer que hubiera dictadura en Uruguay. A fines de los ‘60 estuve con la Resistencia Obrero Estudiantil, una organización sindical anarquista de Secundaria que funcionaba en el sindicato de FUNSA.

Solía escuchar el SODRE porque me gustaba mucho la música clásica, y así me enteré que llamaban a concurso. Me presenté, gané el concurso de locutores, y entré. Como buen anarquista, yo nunca me había afiliado a nada, entonces no estaba fichado en ningún registro. Incluso formé parte del MOP (Movimiento de Oposición Permanente), que era una organización clandestina «en joda» de algunos empleados del SODRE durante la dictadura.

¿El hecho de que el SODRE esté fuera del mercado de los medios permite trabajar con mayor libertad?

Es extraño, creo que la libertad que hemos tenido los comunicadores en el SODRE pasa por el hecho de que las autoridades que deciden, no siempre tienen tiempo, capacidad, o interés de escuchar lo que pasa en las radios.

Entonces suceden cosas que en un medio privado, donde existe otro tipo de seguimiento por deberse a la audiencia y a una cuestión comercial, no podrían pasar. No existe un criterio de empresa privada y de rédito económico en el SODRE.

En todas las radios del SODRE alguna vez se dijeron cosas al aire, intencionales o espontáneas, que si los militares o gobiernos democráticos hubieran escuchado, habrían significado un problema, con despidos o espacios levantados. Hay como una suerte de desidia que permite que programas como Meridiano hayan sobrevivido.

En 2008 hice una versión bastante renovada de Meridiano, con un fuerte apoyo por parte de la radio, por primera vez en la historia del programa se le pagó al conductor, ya que siempre lo había hecho en forma gratuita, jamás había cobrado un peso por hacer el programa, sólo se me pagaba como locutor de la radio.

audioiconAperturas Históricas Meridiano 1977 y 1980.

¿Cómo se gestó la fiesta de “Meridiano Juvenil” en Central, el pasado diciembre, con tantos músicos en escena?

Organicé la fiesta con la gente de “El Grubi de la Esquina”, un proyecto de los músicos Martiniano Olivera, Funfu y Quique Maidana, quienes gestionan eventos fuera del ámbito institucional, van a los barrios, detectan bandas, y generan movidas zonales.

Yo había sido jurado de un concurso que hicieron en [el barrio de la] La Teja, y cuando vi el respeto y profesionalismo con que trabajaban a los músicos, armé la fiesta con ellos, con forma de programa de radio y transmitido por Emisora el Sur 94.7 FM.

Incluso el SODRE decidió apoyar a este evento con dinero, 106 mil pesos que la producción cubrió por su cuenta, sabiendo que tardaría en cobrarlo. Eso me reconforta, tanto como el apoyo de músicos de vasta trayectoria y estilos diversos, y comunicadores de otros medios, quienes estuvieron esa noche solo porque querían estar. Incluso el programa “Monóculo” transmitió en directo la previa de la fiesta por otra radio (1410 AM Libre). Se completaron en total ocho horas y media de transmisión en vivo. Y las ganas de hacer otra fiesta quedaron latentes.

EL ROCK ES EL MENSAJE

“Los Beatles en Uruguay” (ed. De La Plaza, El País) es el título del libro que José Deqo Núñez publicó en 1997, junto a Eduardo Rivero. El libro recopila entrevistas a músicos uruguayos para quienes los Beatles fueron cruciales en su formación -de ahí el nombre del libro, pues los cuatro de Liverpool nunca estuvieron en este país. Jaime Roos, Hugo Fattorusso, Pájaro Canzani, Estela Magnone, Guilherme de Alencar Pinto, Cacho Badín y Alejandro Ferradás, entre otros, cuentan en ese libro cómo descubrieron y fueron influenciados por los Beatles.

¿Qué son los Beatles en tu vida?

Son mis padres. Me enseñaron a no estar conforme con lo que me proponían mis mayores ni la mayoría de los medios de comunicación. El hecho de rechazar, de transgredir, de decir ‘esto funcionó, dejemos de hacerlo, corramos el riesgo y hagamos algo distinto’, es la gran diferencia con los Rolling Stones, quienes si bien tuvieron una actitud más rocker, nunca se despegaron de lo que fue exitoso para ellos. Los Beatles hicieron rock’n’roll, boleros, tap, y cuando tenían éxito lo dejaban. Eso a mí me gustó, así como el hecho de morirse jóvenes. Lennon se murió antes de que lo matara Chapman, porque tuvo un hijo y él optó por ese hijo, luego resucitó cuando lo mataron. De los Beatles nunca tuve la discografía completa, ni siquiera en forma digital. Tengo versiones de todo tipo, pero la discografía original no quiero tenerla, porque deseo que siempre me quede algo de ellos por tener.

¿Qué era para vos el rock hace 35 años, y qué representa hoy?

El rock’n’roll significó no conformarme con lo que me daban de buenas a primeras, ni mis padres, ni los medios de comunicación, ni los artistas ya consolidados. El rock sigue siendo eso, para mí hay rock en el folclore mexicano, Atahualpa Yupanqui, Gardel, o Piazzolla. Es mensaje y actitud. El rock como postura frente a la vida sigue siendo el mismo, pero se manifiesta de otra manera. Es el mismo sentimiento, pero los destinatarios de ese sentimiento han cambiado. Ahora afortunadamente tenemos un mundo donde la información está globalizada, y mucha gente tiene la posibilidad de hurgar en la web y encontrar cosas que la identifiquen. El rock a través de internet te salva de mucha mierda que hay. Podés encontrar grupos de punk cubanos, que se cagan en Fidel Castro, pero no tienen millones de visitas por día.

Hasta hace unos años la radio formaba a sus oyentes, detonaba la curiosidad y fomentaba la búsqueda de material. Hoy todo está al alcance en la web, pero muy pocos orientan al oyente con información musical.

Creo que aquel que tenga la posibilidad de buscar y escuchar, tiene la posibilidad de encontrar cosas que lo hagan escapar de la estupidez y del conformismo. Yo no le tengo tanto miedo a la masificación como a la velocidad. Es más peligrosa la velocidad, esa ansiedad del estímulo respuesta, donde no es posible esperar, todo tiene que ser ya. Es más riesgosa la forma en que se percibe lo que proponen los medios, que los contenidos en sí. Los contenidos siguen siendo diversos y abundantes, pero la forma de adquirirlos es bastante monolítica, es urgente, y eso es lo más peligroso, porque impide que vos dudes. No tenés tiempo de pensar.

Para mucha gente sos un referente, tanto por tus conocimientos musicales, como por tu trayectoria radial. Muchos han aprendido escuchándote.

Yo no soy un comunicador, soy un ‘comunicópata’ (sic). Tengo la fortuna de trabajar de esto sin haber renunciado a mis principios, que son hacer una comunicación que no siga al rebaño, y tener en cuenta a un sector de público que no pretende seguir a los medios masivos, que le gusta que le planteen incógnitas. Tuve la fortuna de formarme como comunicador en una época en la que había grandes monstruos, como Elías Turubich, Ruben Castillo, Carlos Martins, Lalo Mir. Eran tiempos de eclosión, revolución, éramos muy palomas y nos maravillaba cualquier cosa que recibíamos de los medios. El nivel de exigencia de los comunicadores era mucho más riguroso que ahora. Siempre busqué ocuparme de la música que la mayoría de los medios no abarcan.

¿De dónde viene tu apodo, y la curiosa manera de escribirlo?

Mi apodo era una onomatopeya que, cuando tenía apenas unos días de vida, mi padre usaba para dirigirse a mí. Nunca tuvo grafía y yo, en homenaje a mi abuelo sirio, lo escribo con «q» y sin “u”. Ahora, con Google, me entero que hay muchos Deqo, aunque a estas alturas es mi nombre de opción.

Lorena Bello


Daniel Figares, conductor radial. (Foto: Espectador.com). Imagen referencial.

[Testimonio en recuadro # 1]

RADIO ROCK.   Daniel Figares (periodista, escritor) forma parte de la generación que creció escuchando “Meridiano Juvenil”, y luego fue miembro fundacional de la radio que en 1985 innovó uniendo comunicación y rock: Eldorado FM 100.3. Invitado por R, Figares escribe su flashback:

«Cuando salió ‘Meridiano…’ no había nada. ¿Quién te iba a pasar Deep Purple, Led Zeppelin, Psiglo, Días de Blues, o el Woodstock? Eso no sonaba en ‘Impactos’, de Berch Rupenián. La música que se pasaba en ‘Meridiano…’ era la que yo consumía, así que siempre me pegaba una vueltita por ahí. Me alegra que siga girando. Me gustó mucho el libro que el Deqo y Rivero hicieron llamado ‘Los Beatles en Uruguay’, y tengo un ejemplar en mi casa.

También para un libro entero dan los inicios de Eldorado [FM] (que se escribe así, todo junto). Lo poco que se puede decir, en reducida síntesis, es que no ha habido otra radio tan anárquica y libre como esa (y eso que el dueño era flor de facho). Siempre cuento la anécdota del representante inglés de un grupo europeo a quien, al terminar la entrevista, tuve que convencerlo de que había sido entrevistado en una radio oficial: el tipo estaba convencido que Eldorado FM era una radio pirata… Aunque la verdad es que lo era. Por los tipos que la integraban, entre otras cosas. Por supuesto que no lo digo por mí, sino por tipos como Carlos Dumpiérrez, Quique Pereyra, Jean Losteau

El primero nos lo enseñó todo, y nos dejó ser, también.

El Quique, era un fenómeno. Gran amigo, un caballero, y para suerte de todos nosotros (que no sabíamos tanto de música como él, que era un libro abierto), una especie de ayuda musical al instante.

Jean, viejo, querido… anarco, borracho y amigo de las noches como yo… qué se puede decir de esa voz única e irrepetible. Un gran contador de historias también. Clave: “Daniel, vení que vamos a tomar un cafecito, que quiero hablar con vos…” Eran las tres de la tarde, y recién a las cinco de la mañana nos íbamos -con suerte- habiendo tomado mucho alcohol y ni un sólo café.

Pequeños recuerdos humanos, nada de lo profesional.

Como digo, se puede, bien, escribir un libro.

Quique, Jean… ¡¡¡cómo se extrañan!!! (Maestros de la Música y la Vida)»

 Daniel Figares


Garo Arakelian. (foto: TNU). Imagen referencial.

[Testimonio en recuadro # 2]

NADA PASA Y TODO QUEDA.  El guitarrista y compositor de La Trampa, Garo Arakelian, comparte con R la carta que envió a “Meridiano Juvenil” cuando el programa cumplió 35 años:

 “Hoy, con más de cuarenta años, recuerdo con total nitidez llegar a casa caminando desde el liceo, dejar el uniforme obligatorio de ese entonces, encender el radiograbador de la cocina y comenzar el almuerzo con el fondo sonoro de las guitarras con wah-wah de la introducción de Meridiano Juvenil. El programa daba la sensación de tener un portal hacia un mundo fascinante, que encontró la manera de filtrarse a través de la coraza impenetrable que fabricó la dictadura, y fue parte fundamental del sutil modelado de nuestros oídos.

Celebro cada año de vida de Meridiano Juvenil, su rol histórico, su contenido, y el haber sido además una casa que nos recibió cuando alguno de nosotros, con su música bajo el brazo, quiso mostrarla al mundo. Por todo eso, y más, ¡gracias, Deqo!”

 Garo Arakelian


 video-icon48x42Entrevista a José ‘Deqo’ Núñez, (11 de noviembre de 2011).


audioiconApertura, 25 de marzo de 2012.

audioiconApertura-promo de la participación de Néstor Imbriani en el Ciclo de David Bowie en Meridiano. (s/f).


Un ejemplo del contenido del programa, creado por DeQo Núñez para el programa «Meridiano». (Octubre 2014).


» ANDATE FOSATTI», DeQo y el Facebook.

DeQo hizo gala de un gran sentido de humor e ironía en su perfil de Facebook. Muchos a quienes no conoció personalmente, les aceptó como amigos. Y sus intervenciones diarias fueron un ejemplo de su notable personalidad.

Un ejemplo de sus intervenciones:

Cristianos en el mundo: 2 mil millones.
Musulmanes: 2 mil millones.
Humoristas gráficos…  Algunos cientos de miles.
Ta robao!

O esta otra ocurrencia, a iniciar el año 2015:

Teniendo en cuenta la distancia hasta el último planeta de nuestro sistema solar, que nuestro sol es sólo uno entre miles de estrellas en nuestra galaxia, que es también una, entre infinidad de galaxias conocidas; vos y yo, estamos piel con piel.
Así que te deseo que en este 2015 tengas toda la fortuna de encontrar un desodorante realmente efectivo.

Hincha de Peñarol, club de fútbol uruguayo (que últimamente ha estado pobretón en goles), hizo que creara una muletilla que hizo caracteristica de sus intervenciones: «Andáaate Fosatti», en referencia jocosa e irónica al ex Director Técnico  del equipo aurinegro.


audioiconAlgunas de las cuñas promocionales que preparó DeQo para su proyectado Meridiano temporada 2015. Las puso a consideración en su perfil de Facebook, para que sus amigos y contactos eligieran la de su preferencia. Estas grabaciones fueron producidas por DeQo Núñez, en su propio hogar.

audioiconApertura y cierre desde febrero 2015 (boceto, maqueta). 

link_iconEstos y otros archivos de audio se encuentran en el espacio que creó en Soundcloud.


Con su hijo, Lorenzo.

audioiconEntrevista  a Luis Fernando Iglesias. Abogado, docente, especialista en informática jurídica, director de «El Derecho Digital» (www.elderechodigital.com), periodista cultural y escritor. Colaborador del Cultural de El País. (Por Daina Rodríguez, en el programa «Efecto Mariposa», CX26, Radio Uruguay. 26 de enero de 2015).


Más…

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2 respuestas a José «DeQo» Núñez. (1950-2015): Meridiano del rock en la radio uruguaya.

  1. salvador giordano dijo:

    Muchas gracias por el homenaje.

  2. Guayabox dijo:

    Una de esas VOCES que tenían una cara A y una B y daba vuelta por mi cuarto de adolescente girando a 33 1/3 rpm

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